viernes, 23 de marzo de 2007

EL GATO QUE NO SABIA HABLAR

"He recuperado esta entrada por el dolor y el amor con que la escribí el 16 de Octubre de 2006. Fué el mejor gato que jamás podré volver a tener"

Se acabó. Has decidido irte y casi ni nos despedimos. Será porque no podías hablar, aunque a tu manera lo hacías. Quién haya tenido o tenga un animal sabrá de que hablo. Solo con la mirada conseguías comunicarte con nosotros. No puedo olvidar cómo me despedías todas las mañanas cuando me iba a trabajar. Me acompañabas a la puerta y te quedabas ahí sentado al lado del marco mirando como bajaba hasta que desaparecía por la escalera. Gracias por estos años de compañía, amor incondicional y risas. Si risas, tu hacías que despertara el sentido del humor en casa sin darte cuenta. El hueco es grande. Ya no vendrás a restregarte por mis piernas cuando llegue a casa, ni te tirarás a mis pies para que te rasque la barriga. Doblo cada esquina mirando hacia el suelo por si estas, para no pisarte. Papa y Mama estan desolados. Todo el mundo se sorprendía al ver que, en contra de la imagen que se tiene de los gatos, tu eras cariñoso, sociable y no podías estar en una habitación sin personas a tu alrededor. Hecharé de menos los sustos que me pegabas cuando estaba durmiendo y saltabas a los pies de mi cama para hacerte un ovillo, acurrucado entre mis piernas y pasabas toda la noche durmiendo conmigo. Cuando llegaste a casa, en Palma, eras todo orejas. Saliste de aquel transportín e inmediatamente me miraste y te ganaste mi corazón. Estabas lleno de pulgas y apenas te rascabas. Eras bueno por naturaleza. Recuerdo que pensábamos llamarte Lola, hasta que la veterinaria te vió y nos recomendó cambiar de nombre. Por eso fuiste Lucas. Mas tarde te vino el mote de Mojo. Pero eso es otra historia. Viajaste en avión, hasta Madrid. En el vuelo las azafatas se deshacían en regalos y caricias contigo. Te gustó mucho aquella leche concentrada que sirven. Cuando llegamos a Barajas nadie te esperaba. Papa se enfadó conmigo bastante. En casa te limitaron el espacio a la terraza de la cocina pero pronto, tu solito, supiste hacer que te abrieran las puertas de la casa entera y, al final, acabaste siendo el rey. Guardare con cariño la cereza de plástico que te volvía loco en tus juegos. Han sido unos años fantásticos, de cambios, penas y alegrias. Lo que nunca cambió fue tu cariño. Adios compañero.

jueves, 22 de marzo de 2007

BUENA SUERTE, MALA SUERTE, ¿QUIÉN SABE?

En esta ocasión, quiero compartir con vosotros un relato que a mi me ayudó a enfocar los problemas de diferente manera y espero que a vosotros también os guste y enriquezca.

Había un anciano campesino que tenia un caballo.Una mañana el animal se escapó a las montañas. El vecino del dueño, compadecido fue a decirle “¡Qué mala suerte! ¿Ahora como vas a arar el campo?” “Mala suerte, buena suerte, ¿quién sabe?” contestó el campesino.

Unos días después, el caballo regresó y trajo consigo una manada de potros salvajes. Juan, el vecino, corrió a felicitar a su amigo por su buena suerte, pero el campesino nuevamente afirmó “Buena suerte, mala suerte, ¿quién sabe?”.

Al poco tiempo, cuando su hijo estaba domando uno de los caballos, se cayó del animal y se rompió la pierna. Otra vez fue el compungido vecino a lamentarse de la desgracia, y otra vez el anciano, con una serenidad inamovible, le contestó: “mala suerte, buena suerte, ¿quien sabe?”.

Finalmente, llegó al rancho un oficial del ejército que iba a reclutar jóvenes para ir a la guerra. Como el hijo del campesino tenia enyesada la pierna, fue liberado de prestar el servicio.

Este relato de Anthony de Mello, ilustra también el conocido dicho de la sabiduría popular de que “no hay mal que por bien no venga”. Yo, sin embargo, nunca le había dado mucho crédito a este refrán, hasta que llego a mi este cuento. Por alguna razón, las imágenes de la narración se me quedaron grabadas profundamente y entonces empecé a ver las “grandes tragedias” de mi vida con otros ojos. Me di cuenta que en muchas ocasiones, lo que de momento me parecía una verdadera catástrofe, a la larga producía frutos que nunca hubiera imaginado que llegarían.

CONTAMINACION PERSONAL

¿Por que nos dejamos contaminar por las opiniones de otro tan facilmente? No os imaginais el daño que esto puede haceros. Aunque pueda sonar soberbio, NUNCA, JAMAS, os dejeis intoxicar por las opiniones doctas y sesudas de personas que por una causa u otra no estan en condiciones de "aconsejaros". El maestro Paulo Coelho lo explica magistralmente en este texto.

-Las personas que nos rodean en nuestro día a día nos pueden dar pistas muy importantes sobre los pasos que debemos dar. Pero para eso es preciso discernir aguzando la mirada y afinando el oído, porque los que responden demasiado aprisa no suelen ser muy de fiar.

»Resulta peligroso pedir consejo. Dar uno es algo muy arriesgado, si tenemos un mínimo de sentido de la responsabilidad. Si alguien necesita ayuda, puede ser mejor que observe cómo otras personas han conseguido resolver (o no) sus propios problemas. A menudo nuestro ángel emplea los labios de alguien próximo para decirnos algo, pero esta respuesta suele llegar en un momento inesperado, cuando no estamos permitiendo que nuestras preocupaciones oscurezcan el milagro de la vida.

-No vayáis nunca a consultar a un hombre preocupado, aunque normalmente sea un buen consejero. Tampoco pidáis nunca ayuda a un orgulloso, por muy inteligente que parezca. Tanto las preocupaciones como la vanidad turban el conocimiento. Pero ante todo, desconfiad del que vive en soledad: con frecuencia no está allí por haber renunciado a todo, sino por su incapacidad para vivir con los demás. ¿Qué tipo de sabiduría podemos esperar de alguien así?

-No quieras ser siempre tan coherente. Descubre la alegría de sorprenderte a ti mismo. Ser coherente supone tener que llevar siempre una corbata conjuntada con los calcetines. También se deben mantener mañana las mismas opiniones que se tenían hoy… ¡Eso es ignorar el movimiento del mundo!

»Mientras no hagas mal a nadie, cambia de opinión de vez en cuando, y no te avergüences por contradecirte: estás en tu derecho. No importa lo que piensen los demás, porque lo pensarán de todas formas.

-Pero estamos hablando de fe.

-Exacto. Continúa con lo que haces, pero intenta poner amor en cada gesto: esto bastará para organizar tu búsqueda. No solemos dar valor a lo que hacemos todos los días, pero esto es lo que transforma el mundo que nos rodea. Pensamos que la fe es un trabajo de gigantes, pero si leemos algunas páginas de la biografía de cualquier santo, nos daremos cuenta de que era una persona absolutamente común, con la particularidad de que decidió firmemente dividir con los demás lo mejor de sí mismo.

»Son muy diversas las emociones que pueden impulsar el corazón del hombre a emprender el camino de la espiritualidad. El motivo puede ser “noble” (como la fe, el amor al prójimo o la caridad), pero también puede reducirse a un capricho, como el miedo a la soledad, la curiosidad, o el temor a la muerte.

»Nada de esto importa. El verdadero camino espiritual es más fuerte que las razones que nos condujeron a él, y poco a poco acaba imponiéndose, con amor, disciplina y dignidad. Llega un momento en el que miramos atrás, recordamos el inicio de nuestra jornada, y nos reímos de nosotros mismos en aquel entonces. En definitiva, fuimos capaces de crecer, a pesar de la banalidad de los motivos iniciales que nos llevaron al camino.

Fuente: http://www.warriorofthelight.com


jueves, 15 de marzo de 2007

BAMBÚ JAPONÉS

Esta es una de las historias que mas me gusta contar, por que es la pura realidad. ¿Quién no ha recogido nunca los frutos de sus esfuerzos?



No hay que ser agricultor para saber que una buena cosecha requiere de buena semilla, buen abono y riego constante.También es obvio que quien cultiva la tierra no se para impaciente frente a la semilla sembrada, halándola con el riesgo de echarla a perder, gritándole con todas sus fuerzas:¡Crece, maldita seas!



Hay algo muy curioso que sucede con el bambú japonés y que lo transforma en no apto para impacientes:

Siembras la semilla, la abonas, y te ocupas de regarla constantemente.Durante los primeros meses no sucede nada apreciable.En realidad no pasa nada con la semilla durante los primeros siete años, a tal punto, que un cultivador inexperto estaría convencido de haber comprado semillas infértiles.
Sin embargo, durante el séptimo año, en un periodo de solo seis semanas la planta de bambú crece ¡más de 30 metros!



¿Tardó solo seis semanas en crecer?

No, la verdad es que se tomó siete años y seis semanas para desarrollarse.Durante los primeros siete años de aparente inactividad, este bambú estaba generando un complejo sistema de raíces que le permitirían sostener el crecimiento que iba a tener después de siete años.

Sin embargo, en la vida cotidiana, muchas veces queremos encontrar soluciones rápidas, triunfos apresurados, sin entender que el éxito es simplemente resultado del crecimiento interno, y que éste requiere tiempo...Quizás por la misma impaciencia, muchos de aquellos que aspiran a resultados en corto plazo, abandonan súbitamente justo cuando ya estaban a punto de conquistar la meta.Es tarea difícil convencer al impaciente que solo llegan al éxito aquellos que luchan en forma perseverante y coherente y saben esperar el momento adecuado.

De igual manera es necesario entender que en muchas ocasiones estaremos frente a situaciones en las que creemos que nada está sucediendo.
Y esto puede ser extremadamente frustrante.En esos momentos (que todos tenemos), recordar el ciclo de maduración del bambú japonés, y aceptar que -en tanto no bajemos los brazos-, ni abandonemos por no "ver" el resultado que esperamos, sí está sucediendo algo dentro nuestro: estamos creciendo, madurando.

Quienes no se dan por vencidos, van gradual e imperceptiblemente creando los hábitos y el temple que les permitirá sostener el éxito cuando éste al fin se materialice.El triunfo no es mas que un proceso que lleva tiempo y dedicación.Un proceso que exige aprender nuevos hábitos y nos obliga a descartar otros.Un proceso que exige cambios, acción y formidables dotes de paciencia.



Tiempo...

¡Cómo nos cuestan las esperas! ¡Qué poco ejercitamos la paciencia en este mundo agitado en el que vivimos...!
Apuramos a nuestros hijos en su crecimiento, apuramos al chofer del taxi... nosotros mismos hacemos las cosas apurados, no se sabe bien por qué...
Perdemos la fe cuando los resultados no se dan en el plazo que esperábamos, abandonamos nuestros sueños, nos generamos patologías que provienen de la ansiedad, del estrés...


¿Para qué?

Te propongo tratar de recuperar la perseverancia, la espera, la aceptación. Gobernar aquélla toxina llamada impaciencia, la misma que nos envenena el alma. Si no consigues lo que anhelas, no desesperes...

Quizás sólo estés echando raíces...

lunes, 12 de marzo de 2007

BIENVENIDOS

Queridos amigos,

Hoy estoy de estreno. Las tres primeras entradas han sido cogidas de mi space de msn "El Rincón Alquimico-Mediatico del Increible Niño Con Peluca" http://boquepa.spaces.live.com/ Las he elegido por el especial cariño con que las escribí. Me he decidido a inaugurar este blog por que mi vida ha cambiado y con el pretendo reflejar mi nueva andadura. Espero tener pronto muchas cosas que contar. Quiero que este espacio me sirva de cuaderno de bitacora y que cuando lo miré haga de brujula vital. Este blog debe recordarme quien soy, quien fui y quien quiero ser. Por eso mismo, tendré mucho cuidado con lo que publico y siempre será un espejo de mis sentimientos y vivencias. Ni que decir tiene que estais invitados a aportar vuestros comentarios. No habrá censura ni maquillajes.

Un fuerte abrazo,

Raúl.

ALGUIEN VOLÓ... DEL NIDO DEL CUCO

Querido recién emancipado,

A estas alturas la decisión esta más que tomada y nada ni nadie te echará para atrás. Te preguntaras porque te dedico estas líneas entonces. Lo hago precisamente para que no dejes que pase. Creo firmemente en ti y en tus posibilidades. Cuando alguien decide dar un giro tan radical a su vida es porque el cuerpo se lo llevaba pidiendo desde hace mucho tiempo. Por eso se que es la decisión acertada. Esto conlleva muchas alegrías y decepciones. Jamás te dejes llevar por las últimas. Muy al contrario, aprende de los errores y no dejes que te arrastren jamás. Cuando la vida te da lo contrario de lo que quieres piensa que, muy posiblemente, no sea lo que necesitas en ese momento por mucho que pudiera mejorar una u otra situación.

Esta independencia es el fruto de todo lo que has sembrado hasta el momento, que no es poco. Disfruta de la victoria pero recuerda que es solo un paso más hacia la consecución de tu sueño. Te mereces esta medalla por tu heroísmo en la última batalla. Ahora tienes que ganar la guerra. Este es el motivo real de estas líneas. Quiero que sepas que tú puedes con esto y con lo que te echen. Henry Ford dijo un día "Tanto si piensas que puedes, como si piensas que no puedes, estás en lo cierto."

No mires atrás, tu familia, tus amigos y todos los que te queremos seguiremos donde estamos cuando vuelvas. Sobre volver podría hablarte pero... es otra batalla que libraras cuando se presente.

Hagas lo que hagas mira siempre hacia arriba porque el limite esta en las nubes. La buena noticia es que en esta guerra no hay vencedores ni vencidos. Solo habrá lo que tú quieras que haya. Comete el mundo con la honradez y humildad que siempre te han caracterizado. Si algo es legal, no hace daño a nadie, es bueno para ti y para los demás no dudes nunca en llevarlo a cabo.

La suerte es algo que uno mismo se crea. Se que llegará el momento en que me contarás que alguien conocido te ha dicho "Vaya suerte has tenido, que bien te ha ido" y tu le habrás podido decir "¿Suerte? ¡ja,ja,ja! Años de esfuerzo". Así que mucha "suerte" y no te dejes llevar nunca por el desanimo o la desgana. Te quiero un "güevo". Cuídate mucho.

Hasta luego,

El Increíble Niño Con Peluca.


SUPERHEROE DE CARNE Y HUESO

La primera imagen que tengo de tí es sentado en el pilón del pueblo haciéndome una barquita de juncos para que jugara en el agua. Cuando la ví me pareció de todo menos una barca, pero no te dije nada porque ya era consciente del amor con que me la habías hecho. Cuando nos cansamos de intentar hundirla subimos al cortafuegos para tirar piedras al vacío y "ver quien llegaba mas lejos". Ni que decir tiene que yo siempre llegaba muy, muy lejos. Después nos retiramos a casa para seguir navegando con la barca en el barreño de la abuela. Yo tendría unos 4 o 5 años y ya eras mi superhéroe. Pensabais que lloraría cuando mi padre me dejo para pasar el verano con vosotros. Lo que no imaginabais era que yo ya os quería como si fuerais mis padres.


Disfrutaba enormemente con tus historias. Aventuras y desventuras con un protagonista al que yo admire siempre por su sabiduría y entereza. Niño, zapatero, campesino, militar, futbolista, voluntario en la cruz roja, frigorista, albañil, operario en la fundición, maquinista, jardinero... en cada historia te disfrazabas de cualquier cosa para mi. Lo que mas admire con el paso del tiempo es que todas y cada una de esas historias eran verídicas.


Los sábados por la mañana me encantaba asaltar junto a mi hermano tu cama para "hacerte prisionero". Nunca lo conseguíamos pero no por eso desistíamos y lanzábamos ofensiva, tras ofensiva que tú, pacientemente, rechazabas con una sonrisa permanente debajo de ese bigotillo, que vivió contigo desde los 14 años, como te gustaba contarnos, hasta tus últimos días.


Todavía no he reunido el suficiente valor para escuchar tu cinta favorita. La de cuando éramos pequeños. Si, esa. “Una sardina…dos sardinas… tres sardinas… y unnnn gato!!!”. Como disfrutabas.


Hecho de menos aquellos paseos por "los caminos de cabras", recoger orégano, tomillo y hierbabuena. Tus clases de botánica eran magistrales. "Como conseguir una cuerda en medio del monte" es un secreto que solo compartiste con nosotros.


Fuiste mi modelo a seguir. Jamás conocí alguien tan integro y digno de admiración. Sacaste siempre tu familia adelante sin importar el tipo de trabajo o esfuerzo extra que hubiera que hacer pero sin robarles ni un minuto del tiempo que debían disfrutar de ti. Te tocaron tiempos difíciles pero como buen superhéroe de comic capeaste cualquier temporal con la facilidad innata que te fue otorgada.


El final no fue para ti mucho más fácil que el principio pero por fin, después de toda una vida entregado a nosotros conseguiste el descanso que tanto reclamaste en tu lecho. Quiero que esto sirva de homenaje a un hombre que me formo como persona y cuyas enseñanzas no olvidare jamás. Mi superhéroe de la infancia. Te quise y siempre te querré. Espero el día en que nos volvamos a reunir allá donde estés, con tu hija, el abuelo pablo y tus hermanos. Seguro que ya le habrás hecho unas sandalias nuevas a San Pedro y habrás puesto una chapita con tu nombre en la puerta.


Hasta luego abuelo.

CINE ARGENTINA

Ya hace un par de meses que te fuiste y todavía te siento cerca. Espero que esta sensación dure toda mi vida. Es lo que me queda despues de todo. Cada rincón de esta ciudad provoca en mi un recuerdo tuyo. Ahora mismo te estoy viendo en El Retiro, remando y comprandonos a mis hermanos y a mi helados y golosinas. Gracias a tí conozco la figura de Gandhi del museo de cera. Nunca te lo dije pero tenías razon, da la sensacion de que esta respirando. El Parque de atracciones de Madrid no tenia secretos para ti. Echare de menos los bocadillos de calamares en "Casa Rua" todas las Navidades despues del paseo de rigor por Sol y el centro para ver las luces. Jamas olvidare tu afan de superproteccion y lo mucho que nos querias. Me diste mis primeras zapatillas "de marca" y todo el amor que un ser humano puede regalar a otro. Los recuerdos son constantes. Vimos "Conan el Barbaro" en el "Cine Argentina". Aquel maravilloso cine de barrio cerro sus puertas hace muchos años, pero la imagen no se borrara de mi mente, igual que pasara contigo. Te has ido lejos y confio que estaras mejor que todos nosotros, pero yo te tengo y te tendre presente siempre. Te admire hasta el ultimo dia y lo seguire haciendo el resto de mi vida. Gracias a Dios no me quedó nada mas que decirte. En la maleta te llevaste todo el amor y el cariño de los tuyos. Te quiero con toda mi alma. Descansa en Paz "Upi". Viviras por siempre en mi recuerdo.